La primera persona que amas debería ser tú mismo

En lo más profundo de su ser una persona añora ser amada. Es parte de tu necesidad vital, pero ese amor no llegará sino hasta que aprendas a quererte a ti mismo. Tristemente caemos en comportamientos contrarios, saboteándonos a nosotros mismos, convirtiéndonos en nuestros mayores jueces e involucrándonos en situaciones que nos hieren, nos maltratan y nos enferman.
IMAGEN: TINY BUDHA
Me estaba acercando a mi 23 años y yo estaba en una relación con alguien con quien no me sentía del todo cómoda, me estaba dando cuenta rápidamente que realmente no lo amaba, lo cual era un desperdicio de tiempo para ambos. Yo quería viajar. Quería estar soltera. Quería salir. Quería que mi corazón se rompiera. Yo quería estar sola. Yo quería ser egoísta. Anhelaba experimentar cosas que hasta ahora sólo había leído, lo bueno y lo malo.

Terminé la relación. Fue difícil. He experimentado la ruptura, pero me encantó. Conocí a otros chicos. Reservé el viaje de la vida. De repente tuve todo lo que quería. Mi enfoque en la vida se centraba en mí. Estaba tan feliz que resultaba un poco incómodo para los demás. Seguí mis propias pasiones y sueños y sólo respondí a mí mismo. Y mi respuesta fue sólo que sí.
´

Las experiencias te hacen quien eres. Siente tus emociones, abraza el dolor y prospera en él. Haz lo que te hace feliz. Acepta y siente los tiempos difíciles. Durante los años estarás pasando por tanto, creciendo, cambiando. Siéntelo. Experimenta cada parte insignificante de la vida. No es difícil expresarse afecto, es necesario. No se trata de ser egoístas, porque amarnos es lo mínimo que podemos hacer por nosotros mismos, es dejar de esperar que otros nos den lo que nosotros mismos podemos concedernos y que nos permitirá vivir una vida de mayor plenitud.

Ahora es el momento de ser egoísta y crear tu vida. Descubre quién eres realmente y cuál es tu pasión. Acéptate y ama quien eres. Debes estar orgulloso de cómo está sucediendo la vida para ti. Viaja. Cumple tus sueños. Enamórate. Vive.

¿Quién mejor para aprender a amarte que tú mismo?

Comentarios