Entrega tu control para convertirte en quien realmente eres

Es extraño cómo pensamos que podemos encontrarnos. Como si la esencia de nuestros seres pudiera encajar en palabras de lenguas familiares. Como si pudiera pertenecer a un color identificable y perceptible. Como si pudiera ser cantada en una canción de sílabas audibles. La verdad es que somos tan vastos como nuestro potencial inexplorado, tan grande como el sol y las estrellas, y tan salvaje como el espíritu universal de la vida.
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Nuestra verdadera naturaleza no es algo que pueda domarse, sólo se puede entender. Tal vez nuestro viaje no se trata de encontrarnos. Tal vez nuestro viaje es sobre permitir, y recordar quiénes somos realmente. Hemos olvidado que nuestra mayor fortaleza es nuestra intuición, inteligencia emocional, empatía e imaginación. Hemos olvidado que nuestra mayor felicidad radica en el amor, la comunidad, el bienestar y el propósito. Podemos haber dominado diferentes dialectos, pero hemos olvidado el lenguaje de la conversación del alma.

Nuestro subconsciente oculta nuestros miedos y necesidades más profundas, y también nos conecta a la fuente de nuestro potencial creativo. A nuestro ego no le gusta el terreno desconocido e incierto del subconsciente. Se aferra a un sentido rígido de identidad fijado en la validación y aprobación externas. Nuestro ego es la única forma en que sabemos cómo dar sentido a la locura de nuestro universo impredeciblemente fascinante. La magia de lo desconocido es tentadora, pero también amenaza el núcleo de nuestras zonas de confort. Empuja nuestros límites y obliga al ego a confrontar su miedo a la disolución y a la muerte.

Cuanto más te des cuenta de ti mismo, más te transformarás en lo que realmente eres, en lugar de cambiar en quién no eres. Cuando somos honestos con nosotros mismos, dejamos de crear nuevos roles para que el ego juegue, y simplemente empezamos a mirar. Conciencia trae a la luz todo el dolor, la oscuridad y las partes incómodas de nosotros mismos que hemos negado y suprimido. Cuando desarrollamos una intimidad más profunda con otras personas y lugares, en realidad estamos simplemente conectándonos a partes inconscientes universales de nosotros mismos. Cuando comprendemos quiénes son realmente y de dónde venimos, podemos aprender a amarlo. Amar algo incondicionalmente te permite sanar y aspirar hacia tu ser más elevado o la mejor versión posible.

Todo lo que asumimos acerca de nuestro futuro viene de nuestra experiencia pasada. En lugar de vivir nuestra vida de acuerdo con las expectativas del pasado, debemos estar abiertos a nuevas experiencias que nos revelan a nosotros. Podemos ponernos en contacto con el verdadero yo, si dejamos de rechazarnos, y dejar de resistir el flujo natural de la vida. Debemos dejar de lado las nociones preconcebidas de cómo deben ser las cosas. Esto no significa que deberíamos ser pasivos. Esto simplemente significa que debemos dejar de lado nuestra necesidad de controlar.

Necesitamos dejar de encontrarnos y comenzar a descubrirnos a nosotros mismos. Tenemos que dejar de intentar cambiar, y empezar a transformar. Tenemos que dejar de hacer, y empezar a ser. Necesitamos parar, y simplemente necesitamos aprender a escuchar.


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