Cuando nosotros como padres les ofrecemos a
nuestros hijos comodidad, cuidado desde pequeños y bastante afecto, sin darnos
cuenta les estamos dando las mejores herramientas para el manejo del estrés.
Pero eso no quiere decir que los padres son los únicos responsables de
incentivar en los niños el correcto manejo del estrés. Incluso los niños que
han sido tratados con mucha calidez y cariño pueden tener problemas de conducta
y estrés. Es por eso que es muy importante entender cómo funciona el proceso de
orientación y cómo podemos ayudarlos. A continuación, te presentamos los 4
pasos a seguir para poder lidiar con el mal comportamiento o estrés de tus
hijos de manera efectiva.
Reconoce cuando tu hijo tiene un exceso de estrés
Gran parte de tu trabajo como padre consiste en aprender
el significado de los diferentes comportamientos que adopten tus hijos y así
saber qué hacer cuando se presenten. Si aprendes a leer y reconocer las señales
que tu hijo muestra cuando está a punto de experimentar alguna situación de
estrés o enojo, habrás dado el primer paso en este proceso.
Identifica los factores de estrés en la vida de tus hijos
El estrés en los niños normalmente está ligado a peleas
con sus amigos del colegio o sobre carga de tareas. Pero el estrés también
podría estar oculto y tener fuentes biológicas. Por ejemplo, algunos niños se
irritan por el exceso de ruido en un lugar, el exceso de luz o algún olor
fuerte y esto puede causar problemas a lo largo de sus vidas si no lo
identificamos a tiempo. Otras cosas que le pueden causar incomodidad o molestia
pueden ser el aburrimiento, tener que esperar o estar sentados mucho tiempo.
Reduce los factores de estrés
Es sorprendente como simplemente al reducir los factores
de estrés puede cambiar el comportamiento de un niño. Podemos estar etiquetando
a un niño como desobediente y malcriado cuando lo único que pasa es que está
sufriendo de algún factor de estrés y por eso se comporta de esa forma.
Eso les puede pasar a muchos padres que no han reconocido
qué es lo que les estresa a sus hijos y los reprenden constantemente. Una vez
identificados los factores de estrés, les aseguro que será mucho más fácil
ayudarlos a evitar que se agobien y tengan malos comportamientos.
Ayuda a tus hijos a encontrar estrategias que ayuden a
calmarlos
Todos necesitamos estrategias para reducir la tensión y
recuperar la energía perdida. No hay una talla para todos, por lo que es
importante guiarte de las señales que te da tu hijo, para que así la estrategia
que él use este justo a su medida.
Ayudar a tu hijo a desarrollar poco a poco conciencia en
sus estados de ánimo y encontrar técnicas de relajación para ayudar a calmarse
puede ser increíblemente poderoso. Pero es importante que estas técnicas sean
usadas de forma agradable. Ya que, de no ser así, podrían convertirse en una
carga más para los niños y estresarlos.
Escrito por Kevin Guanilo de Hoy Aprendí.
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