Desde el momento en que somos niños, a muchos de nosotros
se nos dicen cosas tales como "No llores" y "No hay nada de qué
estar triste". Como cultura, a menudo se nos enseña que debemos tratar de
evitar emociones desagradables a toda costa. Por lo tanto, para muchos, el
impulso primario cuando están experimentando emociones desagradables es tratar
de escapar de esos sentimientos a través del alcohol, las drogas, la
restricción de alimentos, sexo compulsivo o una variedad de otros
comportamientos auto-perjudiciales.
Creo que es mucho más saludable "experimentar" tus
experiencias de dolor, en lugar de intentar adormecer tus emociones.
Aquí hay tres razones por las que es importante permitirse
procesar y experimentar tus verdaderos sentimientos.
Cuando adormeces la tristeza, también adormeces la
felicidad y la alegría
La realidad es que no se pueden entumecer las emociones
de forma selectiva. El uso de comportamientos negativos para evitar tus
sentimientos puede ayudarte a experimentar menos tristeza y enojo, pero también
te impiden sentir felicidad y alegría. Parte de lo sorprendente de ser humano
es que somos capaces de tener una gama de emociones. Experimentar la tristeza y
el dolor es parte de lo que hace que sea increíble sentir alegría y felicidad.
Piensa en tus sentimientos como ondas en el océano. Van y
vienen, suben y bajan. Ningún sentimiento dura para siempre; La ira y la
tristeza son partes necesarias y útiles de la experiencia humana. Además, todas
nuestras emociones contienen regalos y nos ayudan a crecer como personas.
Luchar con tus emociones a menudo conduce a más
sufrimiento
Tratar de luchar contra nuestros sentimientos a menudo
conduce a más sufrimiento. El uso de comportamientos negativos para tratar de
adormecer nuestros sentimientos es similar a poner una venda en una herida
abierta. Pueden hacer que te sientas mejor temporalmente, pero estos
comportamientos no "arreglan" el problema subyacente. Además, el uso
de estrategias de afrontamiento negativo para adormecer las emociones hace que
la gente se sienta peor a largo plazo.
En lugar de intentar suprimir tus sentimientos, trabaja
para ser un observador atento de ellos. Observa las emociones que experimentas
y dónde las sientes en tu cuerpo. Luego, trata de cultivar una postura curiosa
y sin prejuicios. Nuestras emociones son a menudo mensajeros que señalan algo
importante a lo que necesitamos prestarle la atención.
Procesar y experimentar tus sentimientos es parte de
tener una vida plena
Cualquier persona en la agonía de un trastorno
alimentario, la adicción, el adicto al trabajo, o la adicción al sexo puede
decirte que estar constantemente tratando de huir de tus emociones es agotador.
Cuando se centran en anestesiar sus sentimientos en lugar de procesarlos y
utilizar estrategias de afrontamiento saludables, se impiden vivir una vida
plena y significativa. El dolor, la frustración, la pena, la tristeza y la ira
son partes naturales y saludables de la experiencia humana. Cuando tratamos de
suprimir estas emociones, somos incapaces de prosperar. Parte de tener una vida
plena es sentir todas sus emociones, tanto agradables como desagradables.
Escrito por Kevin Guanilo de Hoy Aprendí.
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