Seamos sinceros. Vivimos en un mundo dominado por la
vanidad. Todos queremos lucir bien y sentirnos bien, y no pararemos para nada
para lograr esa "imagen" y sentimientos deseados. La vanidad moderna
nos hace ir hasta los extremos para encajar. Nos endeudamos para comprar ese
coche de moda, pasamos nuestro precioso tiempo delante de los espejos, pasamos
más tiempo dándonos palmadas en la espalda en vez de amar, e incluso nos ponemos
en las mesas de operaciones en un intento de ser algo que no somos.
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| IMAGEN: NEURONREBELLION |
¿Por qué la vanidad es peligrosa?
Puede parecer tonto decir que un rasgo de la personalidad
es peligroso, pero lee esto.
La vanidad moderna es oscura y peligrosa. ¿No me crees?
Mira a todas las personas que están sufriendo (o muertos) debido al melanoma
causado por bronceados excesivo o cirugías mal realizadas. Sólo querían verse
bien ante los demás. ¿O qué pasa con todos los niños que se han suicidado a
causa de los matones? Los matones pensaron que estaban siendo geniales e
impresionaban a los demás, estaban
siendo vanos.
El precio de la vanidad es alto. Aquí hay algunas razones
porqué la vanidad es peligrosa para nosotros mismos y para nuestra sociedad:
No podemos admitir que estamos equivocados
Admitir que estás equivocado es difícil. Lo entiendo. Todos
somos creativos y queremos tener razón. ¿Por qué? Porque estar equivocado
destruiría nuestra pequeña imagen perfecta en la cual hemos trabajado tan duro para
construirla. El inconveniente es que si nadie en el mundo está equivocado,
¿quién tiene razón? Podemos creer que estamos en lo cierto, pero en realidad
estamos simplemente apartando la verdad. Y un día, nos escabullirá y nos caerá
como un balde de agua fría. La verdad tiene una manera divertida de hacerte ver
las cosas.
Las personas vanas no son dignas de confianza
Tal vez eres exitoso y muy apuesto. Tal vez eres rico. Tal
vez eres incluso el Presidente de los Estados Unidos. Pero si estás tan lleno
de vanidad, y la demuestras, estás diciéndole al mundo que no se puede confiar
en ti. La vanidad causa obsesión. Si estás obsesionado contigo mismo, entonces
esa es la única persona que realmente te importa. Las personas vanidosas no
tienen lo que se necesita para ser un amigo. No tienen lo que se necesita para ser
un líder. No puedes contar con ellos. No son dignos de confianza.
La vanidad provoca la auto-aversión
Auto-obsesión conduce que la mente estrecha pueda cegar a tus
defectos, pero con el tiempo vas a fracasar. Fracasarás lo suficientemente mal
como para que ni siquiera tu visión sesgada de ti mismo pueda evitar notar esto.
Y puesto que estás tan obsesionado con la perfección, te vas a golpear cuando
fracases. La vanidad es una montaña rusa emocional de elogiarte y de impulsarte
para arriba. Ese tipo de paseo nunca es divertido. Cuanto más te golpees a ti
mismo, más te odias a ti mismo. La vanidad es como una droga. Durante un tiempo
te sientes muy bien, pero si te entregas demasiado, terminas en una muy mala
espiral descendente.
¿Cómo dejar de ser tan vano?
La confianza y el amor propio son grandes cosas. Son
poderosos, inspiradores y valientes. Sin embargo, es una línea fina entre la
confianza y la vanidad. Una vez que pasas a la vanidad, pierdes tu
autoconciencia. Pierdes la responsabilidad de quién eres. La verdad es que la
vanidad proviene de la inseguridad, así que, en realidad, la gente vana es muy
insegura. Ellos constantemente buscan la alabanza y la afirmación de los demás.
Ellos quieren ser "cool" y encajar. Entonces, ¿cómo pasar de la
vanidad a la confianza en ti mismo? Aquí hay algunos consejos:
Deja de compararte con los demás
En el mundo de hoy, es más fácil navegar a través de medios
de comunicación social y ver fotos de modelos hermosos, los propietarios de
negocios exitosos y gente adinerada. Es difícil no empezar a compararse a ellos
y encontrar maneras de modelar su comportamiento, pero debes resistir. Eres
quien eres, y eres perfecto de esa manera.
Construye tu humildad
Sí, puedes ser inteligente. Sí, puede que seas hermoso.
Probablemente eres muy bueno en algunas cosas. Pero nunca pierdas de vista el
hecho de que eres muy pequeño en este gran mundo antiguo. No eres bueno en
todo, y hay gente por ahí que sabe mucho más que tú. No eres tan poderoso como
te gustaría pensar. Sé humilde. Deja ir todo ese orgullo.
Sé agradecido
¿Tienes un techo sobre tu cabeza? ¿Comida en tu plato? ¿Un
cheque de pago? ¿Sabes que hay millones de personas por ahí que desean tener esas
cosas? No estoy tratando de hacerte sentir culpable, pero esta es la realidad. Mientras
que estás ocupado preocupándote acerca de lo perfecto que es tu cabello,
alguien con cáncer está perdiendo el suyo. Miles de personas en nuestro país
duermen en las calles y roban por comida todos los días. Hay personas que
mueren por enfermedades que nos vacunan. Así que haz espacio en tu agenda para
un hábito diario de agradecer las cosas que tienes. No necesitas más. Necesitas
ser feliz con lo que tienes ahora.
Escrito por Paola Céspedes de Hoy Aprendí.
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