Hay mucho que quieres hacer con tu única vida. Pero al
querer tener éxito, es fácil perderse en la idea de hacer más. Más viajes, más
dinero, experiencias, libros, relaciones y así sucesivamente.
![]() |
IMAGEN: MOOPIO |
Te centras tanto en estos aspectos externos, que tal vez
prestas poca atención a los hábitos que más importan. Lo que dices y piensas
es, de hecho, más importante que lo que haces. Las palabras que pronuncias
sobre una base diaria tienen un enorme impacto en las decisiones que terminas
tomando.
Aquí te mostramos las 7 frases que necesitas dejar de
decir si quieres tener un mayor éxito.
"Necesito solucionar este problema”
Piensa en cómo decir esta frase te hace sentir. Primero, te
sientes obligado porque te has dicho que NECESITAS hacer algo, lo que hace más
probable que te rebeles y no hagas nada. En segundo lugar, has llamado a tu
situación un problema, y por lo que has compartimentado una parte de su vida en
una caja. Lo guardaste. De modo que es algo con lo que necesitas luchar.
Un problema nunca es un "problema", es un desafío.
Piensa en cuán poderosa es esa palabra. Con un problema es más probable que
desees esconderte. Con un desafío, al instante sientes una oleada de energía
para tomar alguna acción para avanzar, para tener éxito.
"No puedo
esperar"
Esta declaración parece ser el tipo de cosa que te hará
sentirte emocionado. ¿Pero no puedes ver que mirando hacia adelante a otro
punto, te estás diciendo que este momento actual no es tan bueno como podría
ser? Así que estás sacrificando tu vida, por un escenario imaginario que no
tiene realidad propia. Puedes dejar que una visión del futuro te inspire, siempre
y cuando no devalúe el momento actual. Pisa cuidadosamente con "No puedo
esperar".
"Estoy cansado"
A menudo decimos esto cuando estamos tratando de hacer algo
que realmente no queremos hacer. De hecho, te hace más cansado sólo con del
acto de decirlo. Una mejor manera de pensar en la situación cuando te sientes
cansado es aceptarlo, y luego proceder a hacer algo que encaje mejor con tus
niveles de energía. No te quejes, simplemente acepta la sensación y sigue adelante
"¿Por qué hice
eso?"
Después de cometer un error, esta pregunta puede ser
constructiva. Puede permitirnos discernir las intenciones detrás de nuestras
acciones. Sin embargo, si nos quedamos atascados en esta cuestión, podemos caer
en un lazo de auto-odio y culpa. La mejor pregunta que merece la pena es:
"¿Cómo puedo asegurarme de no cometer el mismo error otra vez?"
"Desearía no sentirme cómo me siento"
En su libro, “El arte sutil”, Mark Manson sugiere que:
"La aceptación de una situación negativa es una experiencia positiva. El
deseo de una experiencia positiva es en sí mismo una experiencia
negativa". El momento en que resistas la forma en que te sientes es el
momento en que intensificas esos sentimientos. Empieza a abrazar la forma en
que te sientes, todo el tiempo.
"No es mi culpa"
Siempre que culpes a alguien o algo por tus circunstancias
actuales, le das tu poder. Tú rechazas el presente y te arrojas a la víctima.
Mientras que las cartas que te han repartido no son tu culpa, la forma en que
juegas esas cartas es enteramente tu plena responsabilidad.
"Me pregunto qué pensarán”
No es tu trabajo preocuparte por lo que otros piensan. Lo
único que puedes hacer es ser auténtico, y dejar el resto a ellos. Sólo tienes
que mantenerte a ti mismo cuando estás planeando compartir algo con alguien. Si
es algo que sientes que quieres compartir, probablemente lo necesites.
Escrito por Paola Céspedes de Hoy Aprendí.
Comentarios
Publicar un comentario