¿Sientes que las cosas nunca salen bien? ¿O que nunca
puedes conseguir que tu pareja te escuche? A continuación, te presentamos
algunos consejos que puedes usar para darle solución a tus problemas
IMAGEN: PEXELS |
Sé directa
Ser honesto es lo mejor que uno
puede ser. Siendo totalmente sinceros, hablen acerca de lo que quieren y
esperan en su relación. Si ambas partes son adultos maduros, sensibles y
abiertos a las críticas constructivas, hablar dará resultados, siempre y cuando
se haga de una manera tranquila y no en confrontación. Aunque si tu pareja
es del tipo que se comporta infantilmente y se pone de mal humor ante la
crítica, entonces la situación necesita ser manejada de manera totalmente
diferente. Sin embargo, para las relaciones equilibradas entre adultos
maduros, este es el enfoque más sencillo.
Haz uso de las frases positivas
En lugar de usar frases como: "nunca me ayudas con las
tareas", o "¿por qué nunca me escuchas" y otras frases usuales
que la mayoría de personas usan para quejarse sobre su pareja. Usa frases
positivas como: "¿puedes ayudar con las tareas más a menudo?", o
"¿por favor me ayudas con [inserta tarea]?". Cuando utilizas
comentarios negativos das a entender que tu pareja nunca hace nada, y
eso sólo causa resentimiento y una aversión aún más para ayudar. Por el
contrario, cuando aprecias sus esfuerzos, lo haces más
propenso a querer hacer más.
Refuerzos positivos
Cada vez que alguien recompensa o aprecia algo que una
persona hizo, envía una ráfaga de endorfinas al cerebro y la hace más
propensa a hacerlo de nuevo. Esto es el enfoque de la zanahoria y el
palo, que se ha utilizado ampliamente en animales y los estudios muestran que
funciona en los seres humanos también. Así que alaba a tu pareja cada vez
que haga algo que te gusta, y lo encontrarás luchando para
complacerte y ganar tu aprecio.
¡Deja de lado los ultimátum!
Jamás digas la típica frase de: "haz esto o
terminamos". En el momento en que empiezas a hacer valer el dominio
sobre tu pareja a través de un ultimátum, la relación comienza a deteriorarse.
A nadie le gusta ser mandado. Una parte esencial del respeto a tu pareja y
la relación, consiste en no forzarlo a elegir entre tú y algo que debería
hacer. Si tu pareja tiene problemas en hacer algo, respeta sus límites y
no trates de manejarlo a tu voluntad.
Enfoque pasivo-agresivo
Evita usar este enfoque ya que al ponerte de mal humor
cada vez que tu pareja no hace algo que querías, creas resentimiento en
ambos lados. En lugar de eso, recuérdale sin regañar, que le pediste algo y
luego deja que lo haga. Dejar que tu ira se refleje sólo servirá para
empeorar las cosas. Actuar como mártir, o simplemente hacer el trabajo tú
misma no ayudará tampoco. Mantén un enfoque tranquilo, positivo a las
cosas, y no te molestes demasiado por los pequeños detalles.
Como puedes ver, obtener lo que deseas y necesitas en
cualquier relación, ya sea con tus padres, tu pareja o tus hijos no es tan
difícil como parece. Siempre que tus demandas sean válidas. Sigue los
pasos que se indican arriba, mantén una actitud positiva y mucho respeto y
verás la facilidad con la que obtendrás lo que quieres.
Escrito por Kevin Guanilo de Hoy Aprendí.
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