A través de la vida has estado pasando por de un proceso de
acondicionamiento en el que has creado una mentalidad que se desborda de lo que
realmente eres. Como cuando estabas en el colegio y al obtener una calificación
no tan buena pensaste, no soy inteligente. Como cuando participas en algún
concurso y al no quedar en primer lugar piensas, no soy talentoso. Te sientes
criticado y crees que no eres bueno Te miras en el espejo y te comparas con tu
ídolo o con algún actor famoso que admiras y dices, no soy atractivo. Tu
relación amorosa o amical con alguien se rompe y piensas, no soy amado o soy
indigno. Éstos pensamientos, y muchos otros más como estos, se repiten a lo
largo de tus años de desarrollo y en la edad adulta, y se convierten en tu
concepto central de definición sobre ti mismo.
IMAGEN: PEXELS |
Superar esta mentalidad de NO SOY comienza con confiar en
tu mundo interior espiritual. No hay fronteras que restrinjan tu mundo
interior. Pero tu visión del mundo y tu auto-concepto en el mundo exterior
están definidos por tus cinco sentidos. El mundo exterior está siempre
cambiando, lo que, según nuestra definición, significa que no es real.
Esta
conciencia de que lo que permanece inmutable es la única realidad que podría
conducir a experimentar una majestuosa llamada de atención aquí mismo, ahora
mismo.
Realiza un inventario lo más grande posible de las cosas
que te gustarían que definan tu vida. Luego has un cambio en tu mentalidad y en
vez de decir NO SOY a YO SOY. Comenzando con un diálogo interno, simplemente
cambia las palabras que definen tu concepto de ti mismo. Redefine tu auto-concepto
eligiendo las palabras que elijas colocar en tu mente. Prueba esta
reformulación de tu mundo interior como un paso inicial para acceder a la ayuda
de tu yo superior y satisfacer tus deseos.
En lugar de ser incapaz de conseguir un trabajo, cambia a
soy capaz. De la misma manera, reemplaza las ideas de que no eres capaz de
vivir en paz con “Estoy lleno de paz”. Tengo mala suerte en el amor será
reemplazado por “Estoy lleno de amor”. Soy indigno de felicidad se convierte en
“Soy muy feliz”. Las palabras que le siguen a tu YO SOY, que usas
constantemente para definir quién eres y de lo que eres capaz, son expresiones realmente
importantes para definirte. Esto te permitirá elevarte hasta alturas
inimaginables. Enséñale a tu ser externo a aceptar el poder ilimitado de tu
espíritu interno y que las cosas que piensas en tu mente e imaginas,
pueden convertirse en realidad.
Escrito por Kevin Guanilo de Hoy Aprendí.
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