Aprende a limpiar tu vida de personas tóxicas

Cuando realizamos una observación de las personas que nos rodean, podemos darnos cuenta de lo que estamos haciendo con nuestras vidas, qué es lo que le estamos proyectando al universo, con cuál frecuencia estamos vibrando y qué es lo que en definitiva estamos atrayendo.
Cuando vemos que nuestro ambiente es armonioso, que las personas que nos rodean nos ofrecen serenidad, paz, alegría y buenos momentos podemos concluir que estamos emitiendo una energía positiva que se está manifestando a nuestro favor, si por el contrario al hacer el mapeo nos encontramos con personas que perturban nuestra vida, que nos roban nuestra tranquilidad, que nos incomodan o maltratan, es momento de hacer una reestructuración, porque resulta ser que nada ocurre por casualidad, esas personas nos hacen amarga nuestra existencia porque nosotros le damos ese poder, porque estamos atrayendo ese tipo de personas y en resumen porque lo permitimos.

Qué podemos hacer para sanear nuestra vida de personas tóxicas

Revisión de pautas mentales

Lo primero que debemos hacer es una revisión de nuestras pautas mentales, de nuestras creencias y de nuestros pensamientos, a qué le estamos prestando atención y cuáles son nuestras expectativas de las personas que nos rodean, muchas veces de forma inconsciente trabajamos en nuestra contra y decidimos vivir a través del cuerpo del dolor, que no es más que el ego, a quién le encanta el drama y se alimenta de él y por eso atraemos a las personas que nos colocan en esa situación.

Así que en principio revisemos como espectadores cada una de las jugadas de nuestra mente, identifiquemos la necesidad de drama, al hacernos conscientes de esto, podemos ver cómo por “arte de magia” nuestro entorno comienza cambiar y las personas que consideramos tóxicas se comienzan a alejar por ellas mismas o por nuestra actitud o bien dejan de perturbarnos.


Aprender a ignorar

Definitivamente todo en la vida dependerá de la actitud con la cual tomemos las cosas que nos ocurren, muchas veces le damos demasiada atención a algo que nos irrita o nos desajusta, en lugar de sencillamente observar e ignorar. No se trata de ser indolentes o no atender necesidades de quienes nos rodean si está a nuestro alcance, se trata de tomar lo que nos nutre y dejar ir el resto, no engancharnos a lo que nos hace bien y establecer prioridades acorde a nuestra conveniencia.

Amarnos y respetarnos

Por sobre todas las cosas está el valor que nosotros mismos nos demos, de la imagen que tengamos y de lo que creamos merecer, esto dará entrada a nuestro círculo a las personas que estén asociadas a ello, mientras más nos amemos menos dispuestos estaremos a exponernos a personas que de una u otra forma nos perjudican, mientras más nos respetemos más fácil será plantear las barreras necesarias para que nuestra vida esté lo más limpia posible de personas tóxicas.

Este articulo fue realizado gracias a rincondeltibet.com Si deseas seguir leyendo artículos de tu interés sigue explorando el sitio.

Comentarios