Nunca debemos comenzar una
discusión si estamos enojados. Todo el mundo probablemente sabe que esto es
cierto. Pero a veces perdemos el control de nuestras emociones durante una
acalorada discusión, y no podemos detenernos. Lo adecuado es calmarnos ante una
discusión antes que sea demasiado tarde. Aquí te presentamos tres claras
razones de por qué no debemos discutir cuando estamos molestos.
IMAGEN: PEXELS |
1.
PIENSAS
QUE TODO EL MUNDO ESTÁ EN TU CONTRA
Cuando te sientes enojado, pierdes el control no solo de
tus emociones sino también de tus convicciones debido al funcionamiento interno
del cerebro. Los psicólogos dicen que, si estamos de mal humor, consideramos que
cualquier palabra o gesto de nuestro oponente es un insulto. Sólo terminaremos gritando a nuestro oponente sin una
razón. Y todo esto llevará al final de la relación.
2.
INCONSCIENTEMENTE
HACES QUE TU OPONENTE SE ENOJE
Durante numerosos estudios,
científicos han probado que, si estás enojado, la otra persona comienza a
enojarse también. Este hecho solo indica que es más probable que no puedas
resolver ningún conflicto correctamente cuando estás enojado.
3. NO ESCUCHAS A TU OPONENTE
La ira mitiga tu habilidad
para ser racional. Es por eso que durante una discusión piensas lo peor de la
otra persona que cuando estás calmado. En esta situación, no serás capaz de ser
imparcial con tu pareja ni notar sus mejores cualidades. Pero si durante una discusión ves a tu oponente como una
persona inteligente y carismática, no pensarás que el problema es tan grave, y
podrás solucionarlo de manera más rápida y efectiva.
Escrito por Kevin Guanilo de Hoy Aprendí.
Escrito por Kevin Guanilo de Hoy Aprendí.
Comentarios
Publicar un comentario