Cuando una puerta se cierra, una ventana se abre

El siguiente artículo se trata del arte sofisticado de descubrir posibilidades en tiempos de grandes problemas; y la manera de ver lo bueno en situaciones malas. La vida puede ser un duro paseo. Es duro y te golpea de vez en cuando en la cara. A veces, parece una lucha interminable de un problema a otro. Y como si esto no fuera suficiente, nos encontramos de vez en cuando con un incidente tan severo, tan drástico y chocante que cambia nuestra vida para siempre. En la mayoría de los casos este cambio es para mejor.
IMAGEN: SUBURBS
Hay una lección que aprender en todo lo que te sucede. Y se necesita mucho coraje para descubrir las ventanas que fueron abiertas por tal situación. Permanecer en el dolor y la autocompasión, o renunciar por completo es siempre la alternativa más fácil. Pero en realidad, algunas puertas y ventanas sólo se pueden abrir, cuando una puerta existente está cerrada.

¿Cómo descubrir la oportunidad en tiempos de gran desafío?
A continuación te mostraré algunos de los pasos más importantes para encontrar lo bueno en situaciones malas.

Tómate un descanso, el tiempo te curará
Esto es en mi opinión el aspecto más importante en el descubrimiento de oportunidades en tiempos de grandes problemas. Naturalmente, es posible que no veas abrir ninguna ventana cuando tus heridas emocionales todavía están abiertas y el dolor todavía lo sientas. Tu situación puede parecer desesperada, mientras que la memoria todavía está fresca. Por lo tanto, es importante darte un tiempo, antes incluso de pensar en buscar una ventana que se ha abierto. La razón por la que estoy enfatizando esto es que no estarás listo para descubrir ninguna oportunidad si no te has permitido un tiempo para que te pongas a la altura de lo que pasó.

Dependiendo de la gravedad de lo que sucedió, esto puede tomar meses o incluso años. Pero el tiempo cura todas las heridas; no puedes restaurar las cosas, no puedes cambiar tu vida, solo puedes llegar a un acuerdo con el pasado y seguir adelante. Si dejas que el tiempo pase, notarás que muchas oportunidades nuevas se han presentado, y pueden haber sido integradas ya en tu nueva vida. Esto a menudo pasa desapercibido, en el primer momento.

Distráete
Trata de distraerte centrándote en cosas que no te recuerdan lo que sucedió. Trata con algo bueno. Además, al mantenerte involucrado en una actividad que absorbe totalmente tu mente y tu alma, probablemente pensarás más en cosas positivas, durante un período de tiempo más largo.


Desarrolla la aceptación
En segundo lugar, la aceptación de lo que sucedió es necesario antes de que estés listo para descubrir nuevas posibilidades, desafíos y opciones inadvertidas. El momento perfecto para buscar y descubrir las ventanas que se han abierto es cuando no sientas más pena por la puerta que se ha cerrado.

Ten el valor de encontrar nuevas posibilidades
¿Se necesita coraje para descubrir y aceptar las ventanas como lo que son? ¡Sí, ciertamente! Toma mucho valor descubrir estas nuevas oportunidades y tanto coraje para ver lo que te puedes encontrar detrás de estas ventanas.

Evita comparaciones con la puerta que se cerró
Es tan importante dejar ir la puerta que se cerró. En la mayoría de las situaciones, las ventanas que se abrieron a través de una época turbulenta no parecen nuevas oportunidades en absoluto. Muchos de ellos parecen mucho más como un paso atrás, pero la mayoría de ellos resultarán ser muy profundos y enriquecerán tu vida.

Ir con el flujo y no forzar las cosas
Yo sé por mi experiencia personal que la mayoría de las nuevas circunstancias no se presentan de inmediato, después que una puerta se ha cerrado cerca. Además, el intento de abrir nuevas puertas es en mi opinión contraproducente. En lugar de hacerlo, te recomendaría que simplemente "vayas con el flujo", es decir, haciendo lo que te haga sentir bien en este momento. Un poco más tarde, automáticamente sabrás si estas cosas se han convertido en nuevas oportunidades o no.

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