Había una vez, algún lugar
que podría ser cualquier lugar, y en un tiempo que podría ser
cualquier tiempo, un hermoso
jardín, con manzanos, naranjos, perales y bellísimos rosales,
todos ellos felices y
satisfechos. Todo era alegría en el jardín, excepto por un árbol
profundamente triste. Tenía
un problema: "No sabía quién era."
PEXELS |
– Lo que te falta es
concentración, le decía el manzano, si realmente lo intentas, podrás tener sabrosas manzanas. ¿Ves qué
fácil es?
– No lo escuches, exigía el
rosal. Es más sencillo tener rosas. ¿Ves qué bellas son?
Y el árbol, desesperado,
intentaba todo lo que le sugerían, y como no lograba ser como los
demás, se sentía cada vez
más frustrado.
Un día llegó hasta el jardín
el búho, la más sabia de las aves, y al ver la desesperación del
árbol, exclamó:
– No te preocupes, tu
problema no es tan grave, es el mismo de muchísimos seres sobre la
tierra. Yo te daré la
solución. No dediques tu vida a ser como los demás quieran que seas...
Sé tu mismo, conócete, y
para lograrlo, escucha tu voz interior. Y dicho esto, el búho
desapareció.
¿Mi voz interior...? ¿Ser yo mismo...? ¿Conocerme...? Se preguntaba el árbol desesperado,
cuando de pronto,
comprendió...
Y cerrando los ojos y los
oídos, abrió el corazón, y por fin pudo escuchar su voz interior
diciéndole:
“Tú jamás darás manzanas
porque no eres un manzano, ni florecerás cada primavera porque no eres un rosal. Eres un
roble, y tu destino es crecer grande y majestuoso. Dar cobija a las aves, sombra a los viajeros,
belleza al paisaje… Tienes una misión: ¡Cúmplela!”
Y el árbol se sintió fuerte
y seguro de sí mismo y se dispuso a ser todo aquello para lo cual
estaba destinado. Así,
pronto llenó su espacio y fue admirado y respetado por todos. Y sólo
entonces el jardín fue
completamente feliz.
¿Cuántos serán robles que no
se permiten a sí mismos crecer? ¿Cuántos serán rosales que por miedo al reto, sólo dan
espinas? ¿Cuántos, naranjos que no saben florecer? En la vida, todos tenemos un destino que
cumplir, un espacio que llenar...
¿Cuántas veces tratamos de
ir por el mundo intentando ser lo que otros quieren que seamos, aún cuando esto signifique
nuestra infelicidad? Ten valor y carácter... busca en tu interior y así sabrás hacia dónde
dirigirte cuando no sepas quién eres...
si hay que pensar en uno mism y no es ser egoista es que solo se vive una vez y cada uno es dueño de su propia vida y la desicion de ser felices esta en uno cuando uno es quien es y se ama esta en armonia y en absoluto equilibrio de brindar y hacer felices a a los que estan en nuestro entorno. Seamos felices empecemos desde hoy seamos y hagamos lo que realmente nos hace feliz.
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