¿Cómo sacar los gases de los bebés y aliviar los cólicos?


¿Cómo sacar los gases de los bebés y aliviar los cólicos? Esta es una pregunta que un buen porciento de las madres se hace a diario y quizás ahora mismo tú te encuentres dentro de ese grupo.
Si llevaste a tu hijo con su pediatra, este lo examinó y descartó cualquier otro padecimiento, en eres mamá nos alegramos por ello.

Sí, nos alegramos porque si tu hijo llora porque sufre de cólicos, a diferencia de las muchas enfermedades que puede sufrir, los cólicos pueden remediarse con amor y algunas sencillas técnicas.

Hoy te enseñaremos de qué forma puedes sacar los gases de tu hijo y calmarlo cada vez que se sienta mal.

¿Qué son los cólicos del bebé?
Lo primero que debes saber es que los cólicos que tienen los recién nacidos son contracciones en el abdomen acompañadas de dolor.

Estas contracciones, por lo general, se producen durante las 12 primeras semanas de vida y pueden durar hasta las 2 y las 3 horas. Aunque no en todos los casos, muchos cólicos tienen más prevalencia durante el atardecer.
¿Cómo saber si mi bebé tiene cólicos?
Un bebé con cólicos muestra síntomas perceptibles inmediatamente que le comienza el dolor:

– Llora con insistencia. Se encoge, cierra sus puñitos y se pone colorado. Aunque lo intentes, no logras calmarlo
– Su sueño es intranquilo. No puede dormirse, o se despierta con quejidos apenas se duerme
– Tiene la barriguita endurecida
Así que si notas algunas de estas señales en tu recién nacido es probable que esté sufriendo de cólicos.
¿De qué forma puedo aliviarlo?
Uno de los remedios más efectivos contra el llanto de un recién nacido es el calor y el cariño de su madre.

Si sabes que tu hijo está sufriendo de cólicos acúnalo en tus brazos, bésalo, acarícialo, cántale y háblale de manera dulce.

Luego, sigue estos consejos:

  • Levanta a tu bebé y coloca su cabecita en tu hombro o en tu pecho para que permanezca de manera vertical. Esta es la mejor postura para que salgan los gases de su vientre.
  • Algunos bebés con cólicos no aceptan el pecho aunque sea la hora de la lactancia; otros, sin embargo, le es muy efectivo el contacto piel con piel y recibir la tan necesaria leche materna. Prueba a ver si es su caso.
  • Si a tu hijo le gusta bañarse esta puede ser una buena manera de aliviarlo. No varíes la rutina, mójalo con agua tibia y comprueba a ver si en este estado se siente más cómodo.
  • Prueba a ver si tu hijo prefiere la tranquilidad o los sonidos. Si le gusta lo primero garantízale un ambiente silencioso durante las horas de dolor y si prefiere lo segundo el ruido que hacen la lavadora y el refrigerador pueden servirte.
  • Da suaves masajes en el abdomen de tu bebé siempre observando su reacción. Si tienes miedo de causarle daño opta por flexionarle las piernas y llevarlas hacia su barriguita. Otra técnica recomendable para facilitar el ventoseo es “hacerle la bicicleta” Alternas una piernita con otra llevándola con delicadeza hacia su vientre.
  • No le des ningún medicamento o infusión al bebé por mucho que otra madre te lo haya recomendado. Recuerda que de ti solo necesita tu leche para vivir y desarrollarse; deja que sea su pediatra quien le prescriba cualquier tipo de sustancias extra.
  • Saca los gases de tu bebé apenas lo lactes porque siempre traga aire mientras succiona tu pecho. Súbelo hacia tu hombro y masajea su espaldita de abajo hacia arriba hasta que lo sientas eructar.
  • Paséalo por la casa y sácalo a algún patiecito exterior a que tome el aire fresco. También puedes montarlo en tu coche y darle un pequeño recorrido. Muchos bebés se tranquilizan con el movimiento.
¿Cómo sacar los gases de los bebés y aliviar los cólicos?
Como te habrás dado cuenta para sacar los gases del bebé no es necesaria aprender ninguna técnica especial. Basta con que le prestes la debida atención y lo ayudes a pasar de la mejor manera estos momentos tan molestos.

Si tu hijo no se calma no lo dejes en una sola posición. Acuéstalo boca arriba, cárgalo de manera que se mantenga erguido, luego vuelve a acostarlo pero boca abajo, cárgalo nuevamente apoyando su cabecita en tu codo y así ponlo en diferentes posturas.

El movimiento también le ayudará a remover los gases que tiene dentro y hacer que salgan.


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