Casi todos nosotros hemos pensado en entrar en una dieta en
un momento u otro. Para algunos es sólo un deseo pasajero de arrojar unas pocas
libras antes de una fiesta; Para otros, perder peso es una lucha que dura
muchos años. Sin embargo, un médico sueco, Andreas Eenfeldt, ha sugerido que es
hora de dejar de creer en los mitos sobre la comida y escuchar las señales que tu
cuerpo te envía.
A partir de carbohidratos, que incluyen azúcar; Y de la
grasa.
Durante muchos años nos han dicho que la grasa es mala y
que la única manera de adelgazar es comer productos bajos en grasa y apio. Sin
embargo, si renuncias al azúcar, el cambio que experimentes podría ser algo
diferente. Si lo haces, sucederá algo muy interesante:
Una vez que hayas dejado de preocuparte por consumir grasa
(en cantidades razonables) y dejas de consumir azúcar, podrás mantenerte
delgado de forma permanente, y como bonificación obtendrás una mejor salud
general, más energía y excelente piel y cabello.
Ya no sentirá la necesidad de comprobar la ingesta de
calorías para todo lo que estás comprando. Aun así, tu cintura será lo primero
en disminuir en tamaño.
Si renuncias al azúcar durante tan poco como tres días,
pronto notarás un nuevo sentimiento de saciedad y, en consecuencia, te sentirás
satisfecho a pesar de comer menos comida. Muchas personas que prueban esto
dicen que ya no quieren comer una gran cena y ni siquiera pensar en la comida
hasta el desayuno del día siguiente.
Un menú de tres días:
Desayuno
-Huevos revueltos con jamón o tocino
-Huevos cocidos con una pequeña cantidad de mayonesa
-Cafe con crema
-Queso cottage (no menos de 5% de grasa) con bayas
-Panqueques hechos con harina de almendras
-Una ensalada con verduras y aceitunas
Almuerzo
-Platos de carne: chuletas de carne, carne frita con cebolla
-Sopas (excluyendo los carbohidratos, aparte de patatas y
frijoles)
-Ensaladas (hechas con cualquier verdura y con aceite
vegetal)
-Platos de pescado (excluyendo cualquier cosa con grandes
cantidades de carbohidratos)
Cena
-Vegetales asados (brócoli, coliflor, espinacas,
pimientos)
-Salsa gruesa hecha de huevos y gambas
-Tostadas con aguacate y salmón
-Cualquiera de las opciones del desayuno
Recuerda que cualesquiera de estas opciones de comidas son intercambiables,
y debes comer tanto como desees siempre y cuando sientas apetito. No tengas
miedo de experimentar e intentar preparar comida ordinaria de nuevas maneras.
Si te quedas con este sistema por un tiempo, te
sorprenderás al descubrir que has perdido varios tamaños de ropa. Al mismo tiempo
sentirás hambre con menos frecuencia, estarás libre de problemas con el
intestino y / o la presión arterial, y tendrás más energía.
Lo más importante, este método puede ponerte a cargo de tu
cuerpo y tu vida.
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